La difícil de definir Nike LunarGlide 8 puede pasar perfectamente por una zapatilla de calle y dado su peso podría entrar dentro de la categoría de zapatilla mixta, pero parece más acertado catalogarla como de entrenamiento dada la preferencia por la amortiguación y el confort en vez de la respuesta. Dentro del catálogo de la marca americana estaría pareja a la más tradicional Air Zoom Structure 20, si bien la LunarGlide 8 se sitúa en la colección "Run Easy" que busca la comodidad a toda costa con una amortiguación tirando a blanda y un precio algo menor.
El corte superior de la LunarGlide 8 se basa en "Engineered Mesh" (que desde Nike llaman a veces FlyMesh) de varias capas con el sistema de sujeción FlyWire cuyos cables están parcialmente cubiertos por la capa externa y permiten acompañar el movimiento del pie. De sujetar el talón se encarga un contrafuerte de TPU que aporta una estabilidad extra.
Llama poderosamente la atención el gran volumen de una mediosuela de LunarFoam con Dynamic Support que presenta un compuesto más firme por la parte exterior (Phylon) y otro más suave en la interior (Lunarlon) que proporcionan una amortiguación suave a la vez que estable, una opción perfecta para corredores con una pronación moderada. La configuración de la suela de EVA recuerda a los mapas topográficos y hay que tener cuidado ya que es habitual que se queden incrustadas las típicas piedrecitas en las ranuras hechas con láser.
