La radical Salomon S-Lab Sense 7 es una zapatilla concebida para competir en carreras de montaña, de hecho es el modelo que usan los miembros del equipo de competición de Salomon como el gran campeón Kilian Jornet. Con solamente 4 mm de drop, de construcción mínima y horma estrecha, es el modelo perfecto para aquellos corredores que sepan sacarle todo el partido con buena técnica. Para competir en distancias más largas, la marca francesa tiene la S-Lab Ultra 2 desarrollada en colaboración con destacados corredores como el francés François D'Haene.
El corte superior de la S-Lab Sense 7 es moderno y agresivo, con una malla exterior que cubre la estructura (SensiFit™) que da consistencia al conjunto y un ajuste personalizado gracias al famoso sistema de cordones Quicklace™ de la marca francesa. La lengüeta protege bien frente a las típicas piedrecitas que buscan colarse al interior y cuenta con un compartimento especial para guardar el excedente de los cordones evitando que puedan enredarse con alguna rama o similar. Al igual que otras zapatillas Salomon como la Sense Ride 2 se incluye una plantilla de la casa Ortholite® de una calidad a la altura del precio de venta y ofrece tanto tratamiento antibacteriano como un extra de amortiguación.
Además de de la versión normal de S-Lab Sense 7 que se supone dirigida a correr por senderos y en general terrenos más o menos secos (incluso roca), Salomon también presenta la variante SoftGround (SG) específica para correr sobre terrenos más inestables como hierba y barro. Con un 10% más de peso, cuenta con un corte superior mejor preparado para lidiar con barro y agua (también menos transpirable), a la vez que una suela ContaGrip con tacos más profundos y más separados entre sí para evitar pérdidas de tracción en terrenos complicados.