La Asics Dynaflyte 4 es la prueba de que la tendencia de que zapatillas sencillas, con gran amortiguación y bajo peso (cuyo mayor exponente sería la Saucony Kinvara 10) sigue firme dentro de un catálogo cada vez más amplio. La lucha por reducir peso y ganar amortiguación sin que la respuesta se vea afectada la sitúa en la difusa barrera entre las zapatillas de entrenamiento y las mixtas, si bien la etiqueta de la zapatilla que más cuenta a la hora de comprar es la del precio.
Curiosamente una de las mayores novedades respecto a su predecesora Dynaflyte 3 es la simplificación del corte superior que elimina la capa que ocultaba parcialmente el mítico logotipo de la marca japonesa. La malla tejida tipo "Jacquard" es relativamente flexible y además de presentar un diseño moderno y atractivo, juega con las densidades según la zonas para ofrecer una mejor sujeción o incrementar la transpiración. Los ojales disfrutan de cierta independencia con el objetivo de que la tensión de los cordones se adapte mejor al contorno del pie, una solución similar a la vista en la Gel Cumulus 21.
El resto de la Dynaflyte 4 se mantiene igual con la esperada almohadilla de Gel® incrustada en la parte trasera de una generosa mediosuela hecha únicamente del compuesto FlyteFoam Lyte™, que típicamente se encuentra combinado con el más firme FlyteFoam Propel™ en otros modelos de Asics como su hermana mayor Gel Nimbus 21. La suela tampoco recibe actualización alguna y sigue tanto con el nervio central (Guidance Line®) como las grandes ranuras de flexión en la parte delantera que incrementan la flexibilidad y contribuyen a una transición más suave.
