Ligeros retoques en la Nike Air Zoom Vomero 16 que mantiene esa configuración "convencional" que a estas alturas de la película uno no sabe si es bueno o no con la mayoría de marcas sacando modelos de zapatillas con mediosuelas sobredimensionadas. Está claro que desde la marca estadounidense prefieren mantener una imagen (y nombre) que potenciales compradores sepan identificar con una zapatilla para corredores neutros con abundante amortiguación porque ni siquiera han incluido ZoomX en el nombre comercial, algo que debería aportar al menos un toque de modernidad. De cualquier manera es una zapatilla que desde su nacimiento ha estado a la sombra de la popular Air Zoom Pegasus 38.
Los pocos cambios que se dan respecto a su predecesora Air Zoom Vomero 15 lo hacen en el corte superior, destacando una lengüeta que ahora es más mullida para mejorar la sensación de comodidad. El otro gran cambio tiene que ver con la desaparición de los cables FlyWire que dan paso a una estructura que "agarra" el mediopié y proporciona un ajuste personalizado integrando algunos ojales por donde discurren los cordones, si bien empeora la ventilación del conjunto. No se puede tener todo.
El resto de la Nike Air Zoom Vomero 16 mantiene la misma configuración estrenada en el edición anterior con una mediosuela hecha de un compuesto denominado SR-02 sobre el que se asienta el pomposo ZoomX desde la parte trasera hasta el antepié y una vieja conocida de la afición en la parte delantera: una unidad de Zoom Air. La suela no enamora pero es correcta, en contacto en todo momento con el suelo y como suele ser habitual, una goma más robusta en las zonas más expuestas al desgaste para incrementar la vida útil de la zapatilla. Ale, a correr.